Shion Yumi está casada con su marido y vive una vida feliz. Un día, su marido conoció a dos viejos amigos gordos y ahora trabajan como conductores de camiones de carga. Al día siguiente tuvieron una fiesta para beber en la casa de Shion. Los dos hombres gordos parecían lascivos e inmediatamente notaron a la esposa de su amigo, Shion, porque sus pechos eran tan grandes y su cara tan bonita que querían follársela. Atrayendo a su amiga para que se emborrachara, los dos jugaron libertinaje con su esposa, pero esto no hizo que ella entrara en pánico. Shion había estado carente de sexo durante mucho tiempo y esta era su oportunidad.